martes, noviembre 23, 2004

mi cadena

Ayer me di cuenta de que perdí un cacho de mi vida. No como todos los días, que poco a poco vas dejando que los segundos se lleven tu espacio en blanco y lo ocupen los recuerdos. No fue un dar y tomar. Fue un robo en toda regla: Mientras me duchaba me di cuenta que he perdido la cadena de plata con el Lauburu, el escudo de Navarra y el pañuelico de San Fermín que llevaba colgado desde hace más de diez años. Y me vino el recuerdo de aquel agosto en Zarautz, cuando media hora antes de meterme en el agua mi madre me dio el regalo del cumpleaños atrasado. Una cadena con mi Navarra.... Y respiré profundo y decidí no meterme al agua por si se estropeaba con la salitre o se me perdía en un golpe de agua. Mi madre se reía y me obligó a probar el agua fresquita de aquel domingo. Y desde ese día nunca más me la quité salvo para protegerla de algún peligro. Luego al mapa de Navarra se le unió el Lauburu de mis amigos de toda la vida, a esos a los que les debo muchos de mis mejores momentos; y hace quince días el pañuelico de San Fermín de mi hermana, la recién casada en la misma capilla de San Fermín.
Y todo eso ha desaparecido de golpe y porrazo. Puede parecer una tontería. Pero quien me conozca sabe lo importante que era para mí esa cadenita... En fín. Hay que seguir... Y como me dijo mi madre cuando se lo dije: "Bueno, tranquilo... habrá que ir de nuevo a Zarautz". Yo me sorprendí porque nunca había hablado con mi madre de esta historia. Y la verdad es que se me cayó una lagrimita sin que ella lo viera claro... Y sentí que esa parte de mi vida me espera el año que viene en la playa de Zarautz. Ansiosa, con ganas de que media hora antes de que me vaya a meter al agua, volver a mí.


....

Ya respiro el olor a salitre.

miércoles, noviembre 17, 2004

Cimientos

Casi este weblog se cae. Uno se acomoda en esta vida a la rutina y si no entra en tus planes diarios escribir en la web lo vas dejando, dejando... Pero prometo rehacer mis cimientos. Reconstruir la casa. Desde abajo. Y aquí estoy. Con alergias como siempre, con nostalgias como siempre, con termitas en mi alma como siempre...
Ayer me reía cuando me acerque a ver el mar y un par de perros correteaban detras de una gaviota. Eran perros de estos enanos que no paraban de ladrar y en un salto de estos, uno de ellos se comió una roca de los acantilados próximos a San Pedro.
Vida cotidiana que se sale de la rutina. Esa es la que me ha impulsado a retomar el weblog. Espero que esto no salga mal.

martes, septiembre 28, 2004

pídete un día de fiesta

De pronto un día caminas por la calle y ves a alguien que te mira como tu miras. A los ojos distraidamente. Y te acuerdas de cuando tenías tiempo libre para conocer gente. Y beber cervezas. Y ahora todo eso acaba. Diez horas de curro. Dinero, Piso, problemas.
Hoy he vuelto a escuchar una canción de el ex-sencillos "Miqui Puig" que ha sido un soplo de nostalgia.
"Pidete un día de fiesta,
diles que estas enferma,
yo te vendré a buscar,
temprano a tu casa y saldremos,
los dos juntos a pasear...

Tengo algo que decirte,
no es nada de amigos,
no hay ninguna fiesta,
lo que te tengo que decir empieza con amor y acaba...

Espero que acabe bien,
cafés, manzanas, calles vacias,
abrigos, bufandas,
no piensas decir nada

No cierres los ojos si ya sabes lo que voy a decir,
no importa, es facil"

Hay que pedir días de fiesta y olvidarse de todo y reir....

viernes, septiembre 24, 2004

gafas y recuerdos

Yo siempre quise llevar gafas. Y más cuando a mi hermano pequeño le pusieron y a mí no. Envidías... Confieso que incluso alguna tarde solo en casa me ponía las de mi hermano y me miraba al espejo. Me veía más... más intelectual... eso es. Y el mundo se me presentaba mas profundo y grotesco. Pero en seguida me molestaban y me las quitaba para ir a jugar.
Un niño guapete de Gijón no puede jugar al futbol porque lleva gafas. Fue portada de mi periódico y la última de El Correo. Y me han venido los recuerdos de mi infancia. Lo que para mi era un sueño, para él, era una pesadilla. Tiene 16 balones de fútbol, sus padres se gastan una pasta en comprarle unas gafas como las de Davis.... Lo distinto que pueden ser las cosas para cada persona.
bueno... ya es viernes.... BIEEEEN!!!!

jueves, septiembre 23, 2004

agridulce

Me duele la boca un poco. Y es por un sabor que me tragué ayer a la una de la mañana escuchando la radio. "Y en puestos de descenso, Athletic, Real Sociedad...". Glups, algo agridulce entró en mi boca y ya no se me va. Y mira que he arañado mis dientes con la lengua... Tengo agujetas y no se me va. Era demasiado bonito tener a ese equipo "odiado-amado" en puestos de descenso, sobre todo porque hay una cena de por medio. Pero la Real... NOOOOO... por favor.... chicos, hazdelo por los que todavía defendemos el color azul como un bonito símbolo.
He dicho. Aupa real. (y el Sporting... claro...)

martes, septiembre 21, 2004

el 12

El 12 es una bola negra de billar, compacta y elástica. Se arruga en mis manos y cuando la suelto vuelve a su posición. "Bola 12 relajante", aunque más que relajar hace daño. Hoy viendo este regalo que tengo frente al ordenador me he sentido como mi 12: resisientdo embistes, almodandome a quien me aprieta o me toca y siempre trantado de volver a mi ser y buscar mi sitio.
Hos es martes 21. Llevo dos días en Asturias de regreso y todavía no he vuelto a ver el sol. Se acaba el verano y aquí parece que se lleva a rajatabla. Nubes blancas y bajas llegan a la costa de Gijón y amenazan lluvia, pero no importa, hay que sonreir y pensar que llega en mi opinión la estación más bonita: el otoño.

lunes, septiembre 20, 2004

espacio habitable

Hola. Ya estoy aquí. Buscando espacio. Un lugar tranquilo en el que descansar del día a día, mirar al futuro y al pasado, respirar aire puro y sobre todo: reir y nunca llorar. Porque como decía Pedrito Guerra "hazlos reir, y te darán su risa. Y risa con amor es lo que tu precisas".
Pues nada. Espero que este espacio sea habitado poco a poco por quien lea estas líneas que son una prueba escrita un 20 de septiembre de 2004 a las once de la noche en Gijón, Asturias.